Glosando "Burning veneno del rock" MANOLO FERNANDEZ POMBO BAJISTA (1980-83)
Ultima versión Septiembre 2024. Ricardo Moyano.
Me quedaba subir a la red algunas reflexiones que al hilo de la salida del libro me hizo Manolo Fernández, que fuera bajista del grupo. Es sólo una selección de declaraciones de Manuel, que iluminan aspectos oscuros de esa época clave del grupo, muy poco documentada, y especialmente relevante porque Manolo estuvo muy cercano a Toño Martín, cantante y colíder de Burning, y se mantuvo junto a él durante algún tiempo tras la ruptura de la banda.
Victor Manuel
Fernández Pombo, “Manolo”, o Manolo Fernández, fue el bajista de Burning en
unos años especialmente convulsos para la banda, entre 1980 y 1983, grabó los discos “Bulevar” (1980) y “Atrapado en
el amor” (1982) y estuvo muy vinculado especialmente a Toño. Vive ahora
ruralmente en su Galicia natal, sigue tocando y componiendo, y recuerda
aquellos años salvajes. No está identificado
con la banda actual, ya que no concibe Burning sin Toño ni Pepe Risi. En
2010 estuvo en la presentación del libro “Burning veneno del rock”, y ese día,
y antes y después, nos contó muchos detalles sobre ese tiempo poco conocido de
la banda. Este es un resumen parcial de mis charlas con él, en persona, o por
internet o teléfono.
-¿Cómo
conociste a los Burning?
-Yo era
vecino de ellos cuando vivían o componían en la casa de Torrejón, yo también vivía en
el mismo edificio con otro un grupo, la Charly Band. Había llegado en 1979 de
Londres y les oía tocar; me daba cuenta de que yo estaba en una onda mas
moderna que Burning, que me parecían por entonces muy anticuados, cercanos a
Leño, el rock urbano tan arcaico, etc. Londres estaba muy por delante
entonces en la evolución musical. Yo vivía encima de ellos, en el tercer piso. En todo el bloque vivían muchos músicos, enfrente había un grupo puertorriqueño buenísimo de
salsa, eran tres músicos, y se llamaban “Un poquito de todo”; todos nos quedábamos
extasiados oyéndoles tocar, porque eran buenísimos, y de ahí salió el nombre de
la canción “Un poquito nada más” que grabó Burning en su disco “El fin de la
década” poco después. En ese momento, aunque yo no estaba aún en Burning, ya
era amigo de ellos, iba a su casa cuando componían esos temas que entraron en
el LP, y de hecho tengo que ver con esa canción, como sabes muy biográfica, porque
se nombra a mi mujer, cuando se dice “Chusa tuvo gemelos, pero ninguno
sobrevivío”. Mi mujer entonces se llamaba Mary Luz, pero Toño puso Chusa para
rimar con la melodía. Mi mujer se había quedado embarazada de gemelos, pero ya teníamos un
hijo, sin posibilidades de tener más hijos en ese momento, así que fue a Londres a
abortar...
-Tú
te incorporas exactamente en 1979, después de que se grabe ese disco, cuando tras
unos pocos bolos Quique el bajista fundador de la banda se marcha de Burning.
-Yo
me uní a la banda al marcharse Quique, que era un gran bajista, por
cierto, con un pulso muy firme. Sucedió que yo también me quedé sin grupo. Yo
vivía en el piso con Bibi Andersen, a la que se menciona también en temas de
Burning, su novio, y el músico que tocaba en la Charly Band conmigo; pero mi compañero se mató en un
accidente de tráfico, y el grupo se disolvió. Así que Toño me dijo que si quería sumarme a Burning. Yo no lo veía
claro porque me iba más el sonido por ejemplo de Nacha Pop, yo era amigo de
Ñete y Carlos Brooking. Al final entré en Burning con esa idea de modernizar su
sonido. Y me quedé allí hasta que se fue Toño, toqué más de cien veces con el
grupo. Hay un cambio de estilo, empujo al
grupo hacia el sonido más moderno de la incipiente movida, que era lo que había
que hacer, aunque muchos se llevaran las manos a la cabeza llamándolo música
pop, etc. En realidad íbamos más allá de la movida, que eran músicos que
tocaban mal. La idea era que el disco Bulevar, de 1980 estuviera en la movida,
sí, en esa onda, pero por encima de ella en calidad, que el disco quedara para
el futuro, y ciertamente lo consigue,
así ha sido, es un disco de culto ahora, aunque entonces no tuviera el éxito
que merecía. Pero esa era la línea a seguir, el camino, y yo, que me había
hecho amigo de Toño especialmente, que era el líder de Burning claramente en
ese instante, fui responsable de ese giro musical. Te cuento algunas anécdotas
de cómo se grabó “Bulevar”, ya que el disco no tiene créditos y se desconocen
muchos datos. Toño no sólo cantaba, como piensan algunos, sino que tocaba
instrumentos como tú sabes. En ese momento se había comprado una guitarra Fender Stratocaster, quería tocarla,
y es él quien toca el arranque del tema “Día de lluvia”. Por otro lado, en “No es extraño...”,
que es el tema estrella, hay mucho trabajo, los teclados de ese tema los hice
yo, yo toco teclados a una mano pero hago las armonías bien, sin problema.
También se trabajó mucho el bajo, y el célebre riff central de Pepe, del que se
ha dicho por ahí que no es suyo o que tuvo que grabarse muchas veces, lo cierto
es que no solo es suyo sino que le salió de un tirón a primera toma. Un gran
tema. Ya habíamos logrado con trabajo y ensayos duros sonar bien. Porque en el
rock y en todos los otros aspectos de la vida no hay otra fórmula que trabajar
las cosas, dedicarles tiempo, currarlo. ¡No hay otra!. Lo de las fiestas, las
drogas, el divertirnos, es cierto, éramos jóvenes, pero también nos tomábamos
muy en serio el ser músicos.
-¿Cómo
era la filosofía de la banda?
-Teníamos
unos lemas si quieres un poco chulos,
que se cumplían a rajatabla: como el no irnos sin cobrar, o el que si
había un bolo había que hacerlo, aunque alguien tuviera problemas físicos, ya
sabes. Luego, sobre el escenario, pues había diferentes actitudes. Por ejemplo
a mí no me gustaba el protagonismo, aunque era alto, bien parecido, y podía
parecer dandy, de ahí que Toño me decía que me quedara detrás, para no restarle
nada de su tarea de “frontman”. A Pepe Risi le iba más el destacar, como yo
digo le gustaban “las lucecitas de colores”. Realmente el líder de Burning en
los años que yo estuve allí era claramente Toño, con el que yo me movía más.
Pepe tenía un problema de encontrar su sitio, su modo de ser, y por eso va
cambiando de aspecto, sale con barba y sin ella, con pelo largo y corto, quería
encontrar una imagen. Toño lo tenía más claro. También el más ligón, era muy
presumido, y ligaba mucho. Pepe no, el era más de novia fija, tuvo a Emma y
luego a Marifé, pero no era de cambiar de novias. El padre de Emma, que antes
habia sido su novia, era el dueño del Angelo, un “puticlub” de alto “standing”,
que aún existe; era un tipo de cuidado, muy mafioso, y cuando vio que Pepe
estaba con su hija menor de edad aún le ofreció un montón de dinero para que la
dejara, pero él no quiso... Estaba enamorado de ella. Y entonces vino la movida
de la denuncia, y el que Pepe estuviera detenido, hasta que se demostró que
Emma no era tan inocente, pues había salido ya desnuda en Interviu y
Fotogramas.
-Sí,
era Emma Cruz, que hacía pinitos en esos años en algún papel de cine y como
modelo. Pero volvamos a ti. ¿Tenías formación musical? ¿Cómo llegaste a ser
músico?
-Claro
que tenía formación. A mí me iba desde siempre la música, así que estudié toda
la carrera de guitarra, pues mi padre me dijo, si no estudias una carrera
universitaria, haz otro tipo de estudios, música si quieres, pero que sea
completa, si te va la música haz toda la carrera de guitarra, al menos. Y
estudié con un profesor de conservatorio. Mi padre era mecánico del ejército de
aviación. ¡Mi mejor amigo!.
-Se
cuentan anécdotas tuyas, que tenías un reloj de Balenciaga que dejabas en los
hoteles en prenda…
-Si,
tenía Balenciaga, jaja, pero en realidad sólo me había costado 2.000 ptas.
-Sigamos,
no continuaste con tu mujer, con Mary Luz.
-No,
nos separamos, y salí con una chica bilbaína, que es con la que estaba en ese
tiempo del que hablamos de cuando estuve en Burning. Pero Mary Luz es la madre
de mi hijo.
-En
el disco “Bulevar” no hay créditos. ¿Quiénes lo grabaron?
-Todo
lo hicimos nosotros. Pero para el saxofón que suena en dos temas llamamos no a
Iturralde como se ha dicho, y que había tocado en el disco Madrid, sino a Richard Roda, ya fallecido.
-Todavía
no estaba Mikel Slingluff.
-No,
Mikel llegó después. Es un excelente saxofonista Mikel, usa la respiración
circular y mantiene la nota.... Mikel iba un poco de padre “tened cuidado, no
hagais esto...”, el no se drogaba, tampoco Lito ni Johnny. Mikel era muy
apacible, buen chico. Yo no lo era tanto, jaja, a Mikel le pegué una negra, le vendí su supuesta parte en
Burning, le dije que yo tenía 25% de los
derechos, y Mikel se lo creyó...Yo no tenía royaltis, pero al menos sí logré
registrar temas en Burning.
-El
batería era Lito.
-Sí,
Lito había entrado algo antes que yo, pero el puesto de batería no era muy
estable, Lito se fue un tiempo, y entró Daniel Assante, los dos eran buenos
baterias, Lito estaba ya distanciado y le afectaron algunas historias como el
robo de un bajo, del que me echó la culpa a mí. Despareció un bajo propiedad de
Lito, y él entendió que yo lo había vendido para comprar droga. Ya estaba
bastante “mosqueado” y esa fue una gota que le desbordó. Hay muchas anécdotas de esos años. Un una
discoteca por ejemplo un concierto no nos pagaban, y fieles al lema nos
quedamos, para cobrarnos en especie, soplando gratis copa tras copa. Al final
se convencieron que era mejor pagarnos. Entonces nos pusimos tan contentos que
quisimos ofrecer “bises” al público, la situación se descontroló y la gente
empezó a acercarse pisando una tarima que estaba de adorno, los dueños
decidieron encender todas las luces para boicotear el bis…
-En
Mallorca hubo cosas más salvajes, ¿no?
-Sí,
para ir a un concierto en Can Picafort, que era en la otra parte de la isla,
utilizamos un coche que no era nuestro, y al regresar el coche se incendió… Era
el concierto de Eric Burdon, al que menciona Pepe años después en “Una noche
sin ti”. Fue un bolo algo triste porque tocamos los últimos, ya de amanecida,
el público se fue. A partir de entonces firmamos contratos mejores exigiendo
que pusieran que tocaríamos como mucho a las tres de la madrugada.
-Luego,
hacia los tiempos de Atrapado en el amor, empiezan los problemas de rivalidad.
- Grabamos
“Atrapado en el amor” de 1982... que es un disco más oscuro, es verdad, porque
ya había problemas dentro de la banda, divisiones por el liderazgo, y la droga
estaba ya afectando a las relaciones. Sí, yo creo que el liderazgo que iba
asumiendo Toño, y mi cercanía a él, molestaba, no sólo a Johnny sino incluso a
Risi. En el disco “Bulevar” Johnny había quedado bastante fuera porque yo como
te dije hice muchos teclados, y Johnny queda también fuera de créditos prácticamente. Toño compone casi todo el disco; y cuando
llega “Atrapado”, Pepe no tocaba mucho en el estudio, así que se da entrada al
guitarrista Paco Palacios, que toca muchas partes con el beneplácito de Toño,
lo que creó resquemor en Risi. Imagino que Johnny le dijo a Pepe que los dos
estaban quedando marginados por nosotros, Toño y yo, y el protagonismo de Paco
Palacios. Ahí ya empezaron malos rollos. Si comparamos uno y otro disco, en “Atrapado”
trabajamos a un nivel
mas musical, eran
malos tiempos para
el rock, ya
sabes la movida, etc., se lo comía todo. Toño tenia
la vision de
tirar hacia adelante. Y entre todos sacamos el disco. Bueno, no
quedo tan mal,
temas como “Hermano”, “Extraño en la ciudad”, “Loco por ti, Penny”. Por cierto
que se ha especulado mucho con la letra de “Hermano”, y en realidad se refiere
a mí. Pero había problemas entre
nosotros, ya te digo.
-Pero
por entonces, o antes, no habían existido esos problemas, tú vivías con Risi y
otros en una casa de alquiler en Delicias.
-Sí,
cierto. Toño se fue antes, porque se casó con Esther y se fue a vivir a una casa
que pagó el padre de Esther. Esther se había
quedado embarazada y nació Penny. Antes
vivíamos juntos en esa casa de Delicias, y a esa casa se vino también Marifé
cuando Pepe dejó de salir con Emma y se hizo novia de ella, que estudiaba
veterinaria entonces. Eso fue ya en 1982, en los tiempos de Atrapado en el amor.
Los domicilios no eran muy estables, antes de todo eso también Pepe había
vivido en la calle Jardines, cerca de la sala Sol, le gustaba ir a esa sala y
su dueño Gascón le servía champán, entraba el Pepe en plan estrella, jaja. Marífé entonces era una chica muy sana. Realmente yo
fui quien les presenté. Yo la había conocido poco antes junto a su hermana una
noche de copas en un bar; eran tres hermanas. También la conoció Toño, pero es
falso eso de que fuera novia de Toño un tiempo. Cuando Toño se separó de Esther, y ella se fue
a Briviesca con Penny, Toño se echó un tiempo otra novia que curiosamente se
llamaba también Esther. Pero él sabía que en la ciudad, en Bilbao, caía en los
vicios, así que se marchaba muchas veces a Briviesca a hacer una vida más sana,
a que le cuidara su mujer y a ver a su hijita Penny. Es curioso que en las
letras de Toño está toda su filosofía, como esa tan precisa, “La vida es tan
larga… como para gastar una broma…” Toño parece que no decía nada, y si
analizas sus temas, tenía frases muy profundas.
-Pero
antes de grabar “Atrapado en el amor”, y cuando se está acabando Bulevar en
1980, sale lo de la película “Navajeros”.
-Sí,
Gay Mercader, el gran mánager de los Stones, etc., también conocía y apreciaba
a los Burning, y “Navajeros” fue una peli que nos propuso, dijo “a ver si
convenzo a De la Loma de que salgais vosotros”, Gay era el productor de la
película. Y la hicimos. Lo malo es que nos pagaban ¡con talones sin fondos!. Y ya
sabes el lema de Burning, lo que hacemos lo cobramos. Así que un día Toño, Pepe
y yo nos enfadamos con el tema, y nos plantamos en la productora para cobrar.
¡Y salimos de allí con el dinero en metálico!. Johnny no estaba ese día, así
que se se quedó sin cobrar… Recuerdo a Pepe muy feliz, agitando en la mano los
billetes, era un kilo.
-Vale.
Se edita al fin “Atrapado en el amor”, que tardó mucho en terminarse, seguís
tocando, como esos temas nuevos “Nací perdedor” o “Estrella de la radio” que
iban a salir en un nuevo disco en 1984, pero a fines de 1983, abruptamente, tras una tensa reunión en la cervecería Santa
Bárbara entre Risi, Toño y Johnny, Toño y tú dejais la banda, Lito ya no está,
y sólo se quedan Johnny y Risi con el nombre Burning, que Johnny había
registrado a su favor en ese momento.
-Para
terminar con el disco, yo tuve mucha participación en él, y tengo créditos, les
convencí, lo que era dificilísimo en Burning, eran muy cerrados en eso, por
mucho que colaboraras en los temas. Respecto a la ruptura, yo no estuve en la
cervecería, pero tal como me explicó Toño después, la idea no era en absoluto
dejar Burning, ni algo definitivo, sino tomarnos todos un tiempo sabático, hacer cosas en solitario, la marcha era algo
temporal, Toño y yo probaríamos a hacer cosas en Bilbao, y Pepe, que no quería
ir a Bilbao, las haría con Johnny en Madrid, sin usar ninguno el nombre del
grupo, hasta que un tiempo después nos reuniéramos como Burning otra vez. El
retorno se frustró porque Johnny registró el nombre. Toño se
enteró estando en Bilbao, fue a Madrid a hablar con Johnny y hubo una escena
muy fuerte. Ahí se acabó la relación con él, y también hubo mal rollo durante un
tiempo entre Toño y Pepe Risi, total que ya nunca volvimos a Burning. El último
concierto juntos fue en la sala Bolos de Bilbao, precisamente, en diciembre de 1983,
poco antes de lo de la cervecería. Jamás quisimos dejar Burning, insisto.
Eramos yonquis, ¿cómo un yonqui va a dejar la fuente de dinero que tiene? Además,
si te fijas en el concierto en Rockola de 1983, algo antes del de Bilbao, presentamos ahí dos temas
inéditos, estábamos en buen momento creativo, ¿qué grupo presenta dos novedades
antes de meterse en el estudio de grabación? Y Toño y Pepe tenían muchos temas
para el siguiente LP. En fin, pasó lo que pasó. Años después me encontré alguna
vez con Risi y me dijo que se sentía culpable de todo lo que había pasado con
Toño, que tenía que haberle apoyado más.
-Pero
es curioso que con tu protagonismo en “Atrapado en el amor”, firmando incluso
créditos, no salgas en la foto de portada.
-No
salgo yo, y sí Mikel, por ejemplo, pero fue casualidad, ese día de la sesión no
estaba en el estudio.
-¿Qué
haces cuando dejas Burning?
-Vino
esa etapa en Bilbao, donde Toño vivía en mi casa conmigo y con mi nueva novia,
y grabamos una maqueta en Pan Pot, una discográfica bilbaína, era un disco potente,
se corrió la voz en Bilbao de que estábamos grabando y muchos grupos vinieron a
los mismos estudios, se pusieron de moda. No me acuerdo de quienes tocaron en esa maqueta, sólo que por supuesto yo toqué en ella. Pero las compañías ya habían girado
el estilo y no interesábamos, ofrecimos la maqueta a varias discográficas poro ni
Dro ni ninguna otra quisieron editar el disco. Toño se marcha entonces a
Briviesca a vivir e intentar dejar la droga con la ayuda de Esther, y yo me fui
a Vitoria, y de allí a Francia, a intentar seguir como músico. Estuve muchos
años fuera trabajando. No sabía nada de nadie. Fíjate que cuando volví a España
no sabía que Toño había muerto muchos años atrás, en 1991. Ni me enteré de esa
tristísima noticia. En esos años ochenta los dos estuvimos muy enganchados a la
heroína, yo finalmente logré dejarlo, y ahora llevo una vida muy tranquila en
el pueblo, sigo componiendo mis temas, tocando. Incluso versiones de Burning.
N.Autor 2024: De acuerdo con las averiguaciones actuales, considero que cuando Toño se queda a vivir con Manuel en Bilbao fue en 1983, antes de la ruptura del grupo. Posteriormente, como declaró también Risi y su esposa Marifé, Toño se retira a Briviesca con su esposa e hija, si bien algunos días sube hasta Bilbao, esporádicamente. Las grabaciones a las que se refiere Victor Manuel corresponden en 1983 a la maqueta de lo luego sería el disco Noches de rock and roll lanzado por Pepe Risi cambiando muchas de las letras por otras suyas. Y a comienzos de 1984 y en años posteriores Toño grabó o ensayó temas nuevos, hasta 1989, temas que no son conocidos, salvo alguno que figura en el disco editado en 2024 con el nombre de Muerde la bala por la hija de Toño Martín Penélope.
Se ha criticado el hecho de que el disco Noches de rock and roll utilice los ya elaborados por Toño y Pepe Risi. No obstante, no consta que Toño expresara oposición o malestar por ese disco, y tal vez hubo un pacto para que cada cual moviera sus propias versiones. Pero dado que Burning mantenía contrato con Belter -contrato del que quedaba un disco por sacar, pues era para cinco discos- la compañía editó el disco oficial mientras que las discográficas a las que Toño mostró su maqueta, sin el respaldo del nombre de Burning, no aceptaron editarla. En cualquier caso en ese momento existía un distanciamiento entre Risi y Toño que se superó meses después, manteniendo la amistad hasta la muerte de Toño en 1991 como verdaderos hermanos de sangre. Basta ver todas las canciones y dedicatorias del disco "No mires atrás" de 1993. Como manifestó Penélope Martín: "Se querían muchisimo. De haber sido uno de los dos mujer se habrían casado". Tras la muerte de Toño Pepe Risi apoyó a la pequeña Penélope como un segundo padre, y tanto en vida de Toño como tras su muerte se desplazaba a Briviesca para llevar a Toño y después a su viuda los derechos de autor.
-Llegó a rumorearse que habías
muerto, eso se comentó en foros de revistas de rock and roll.
-Yo no sé si eso fue malintencionado
por algunos. Y por eso me puse lo de “Manolonomehemuerto” como apodo en internet. Pero ya ves que estoy
muy vivo. Fueron tiempos excelentes, tocando con la banda en esos años, ahí
están los discos y los videos como documentos de una época mágica.
Ricardo Moyano, 2015.