jueves, 10 de mayo de 2012

Glosando Burning Veneno del rock. Ultimas grabaciones y conciertos de Pepe Risi

Ultimos bolos y grabaciones de Pepe Risi.- 

 En el libro “Burning veneno del rock” se ha recreado la actividad de Pepe Risi con Burning en sus últimos años con toda la fidelidad posible. Sin embargo, hay algunos errores y también hay nuevos datos en estos últimos años que merecen ser rectificados e incorporados: 

1)Ultimas grabaciones en estudio de Pepe Risi.

Dejando aparte las maquetas que grabó en 1996 con Burning, y que se reflejarían en el disco póstumo “Sin miedo a perder”, y la grabación en vivo en la sala Bikini de Barcelona para Loquillo en diciembre de 1996, sólo existen dos grabaciones de Pepe tras el disco “No mires atrás” de 1993. Eran duros años discográficamente, y los Burning trabajaban para un posible disco acústico que no salió en vida del Risi. Las dos excepciones en que entró Pepe en un estudio fueron la grabación en Valencia para “Una sonrisa terrible” en 1996, y la grabación para el disco de homenaje a Stukas en Avilés.-

 1.1.Sobre la grabación de “Chicas del drugstore” con el grupo “Una Sonrisa Terrible” en febrero de 1996 en Valencia contamos ahora con la amable y pormenorizada explicación de Dani Carmona, baterista y colider junto a Isa “Terrible” de la banda. La colaboración a raíz de la grabación del tema para el disco “Tributo para ellos” del sello castellonense “No tomorrow”. Cada banda tenía que grabar una versión de Burning, e Isa había elegido “Chicas del drugstore”. A Isa le encantaban los Burning, y ese tema, de aire Lou Reed, era uno de sus preferidos. La versión ya estaba grabada pero Isa quería que tocaran además los mismísimos Johnny y Risi, lo que era poner el listón muy alto. Dani y el resto del grupo lo veían imposible, ¡si los Burning no conocían siquiera a Isabel!, pero lo cierto es que la chica no se arrugó, les llamó, y ante la sorpresa del grupo valenciano, aceptaron tocar. El problema esa sólo fijar el momento para que los Burning acudieran a los estudios “Experience” que regentaba Daniel en Alboraya. La oportunidad para ello fue un concierto que los madrileños daban en Manises. Fijaron que al día siguiente del concierto Pepe y Johnny acudirían a los estudios a grabar. Y así lo hicieron. 

Nos lo cuenta Daniel: 
-(Dani): El germen de Una Sonrisa Terrible es esa canción. Isa ,superfan de burning ,me propone a mí hacer una versión (ella estaba en ese momento sin grupo) y me comenta que le molaría que grabaran Risi y Jonhy. Te aseguro que provocó risas entre los amigos .- ¿porqué iban a venir?, ¿sin conocerte, porqué se iban a meter en este rollo?-....en fin, ...Isa sólo contestó, “ ¿Porqué no?”. Les llamó y no hubo dudas, aceptaron encantados. Pensamos en alguien para completar el combo (que fuera fan de burning), llamamos a Julio Milla (bajista en ese momento) , y el set lo completaba "chevi" a la guitarra ( ahora es una estrella del folk, ...instrumentos raros....ya sabes, creo que se cambió el nombre por Efrén? ). Así se formó UST. La canción si no recuerdo mal la escogió Isa, era de sus favoritas. Ellos aprovecharon un bolo que tenían en Valencia (en KU manises concretamente) para venir al día siguiente al estudio. Fue de las experiencias más increíbles que hemos vivido, ¡Qué tios más cariñosos! Allí se respiraba la magia. Le comentamos a Risi que habíamos cambiado el tono de la canción y Johny nos replica (amablemente ) “No le mareéis por favor”. Y es que a Risi se le veía ya que estaba malito. Pero Pepe saltó a puntear la canción en el nuevo tono sin dudar ni una nota mirando a johny como diciendo : “No marees tú”. Grabaron los dos a la primera. Fue increible, un sueño. La siguiente vez que fuimos a verlos en Requena, todavía con las sensaciones en el cuerpo, le llevábamos a Pepe una canción que le hicimos (sólo la tiene él, nadie más la oyó.) ..Y viendo el concierto con Isa cuando llego “Las chicas del Drugstore” , Risi envió al manager a por Isa para subirla al escenario a cantar. Como puedes imaginar flotábamos. Yo no podía parar de llorar mientras intentaba hacer una foto decente. Lloro otra vez de acordarme… (email al autor Abril 2012).

La admiración de la banda valenciana quedó reflejada también gráficamente en su primer LP, donde se reproducía también el tema:



 Burning tocó con bastante frecuencia en esos años en Valencia. De hecho ya habían tocado en The Central (Manises) el 6/5/1994 (tras la presentación de No mires atrás en la sala Sukursal en Enero), y volverían a hacerlo varias veces más, como en esos conciertos en Ku (Manises) y en Requena que cita Dani, hasta el penúltimo concierto de Pepe Risi en abril de 1997 en la sala Akuarela.

Isa Terrible con Pepe Risi Fanzine Matarile junio 1995?


1.2    Grabación en el homenaje a Stukas.- Otras dudas habían surgido sobre el momento de la que sería última grabación de Pepe Risi, el tema de homenaje a Stukas “Reinas de la noche”, y sobre la comparecencia de Burning en el concierto de homenaje a la banda asturiana. Algunos creen recordar a Pepe Risi tocando en junio de 1997, cuando realmente ya para entonces había fallecido. Pero sí es verdad que Pepe Risi tocó con Burning en Avilés, pero no en ese concierto, sino antes en otro extraficial con motivo de la grabación. Ello no sucedió en otoño de 1996 como se especuló en el libro, sino más tarde aún, apenas tres meses antes de la muerte de Pepe, el 7 de febrero de 1997, en los estudios La Factoría, de Avilés (Asturias), el mismo día que grabó La Destilería su tema de homenaje. Tras la grabación siguió un concierto improvisado de ambos grupos. Cuando se celebrara el concierto oficial de homenaje a Stukas, en junio de 1997, Pepe Risi ya había fallecido, por lo que fue uno de los primeros conciertos que los Burning dieron ya tras el fallecimiento del genial guitarrista. Nos lo cuentan con detalle los propios miembros de Stukas: -La grabación del disco-homenaje se hizo en los estudios LA FACTORÍA de Avilés. BURNING registró su versión de "Reinas de la noche" el 7 de febrero de 1997, y en ella participó Pepe Risi. Al día siguiente, el Ayuntamiento de Avilés organizó un concierto-homenaje a STUKAS en el que participaron LA DESTILERÍA y BURNING. El 28 de junio de 1997, se celebró el concierto-homenaje "oficial" a STUKAS, donde el Ayuntamiento de Langreo entregó la medalla de oro al grupo, durante las fiestas de San Pedro de La Felguera, y en el que participaron TODOS LOS GRUPOS que grabaron el disco-homenaje. En este concierto, ya no estaba Pepe Risi.



 2) Ultimos conciertos de Pepe Risi.-

¿Y las actuaciones en vivo de Pepe? Porque a Pepe, ya lo sabemos todos, le gustaba más la carretera y la cercanía del público que los estudios de grabación. En directo es donde daba lo mejor de sí. “Cuando te subes al escenario tienes que creerte el mejor…”. Pues Pepe nunca dejó de tocar. De hecho esos últimos meses de su vida tocó intensamente, sabiendo que era el final. Arrancando del concierto en la sala Bikini de Barcelona con Loquillo y los Trogloditas en diciembre de 1996, la estancia de Pepe la capital catalana duró pocos días, pues el fin de semana siguiente, el viernes 27 de diciembre de 1996, Burning tocó en Huesca en la localidad de Monzón en la nave de la Azucarera, habilitada para conciertos de rock, junto a los grupos Kelean y Bato Ziego. Tras la grabación y el concierto en Asturias de febrero de 1997, Pepe Risi continuó tocando con Burning. En el libro datamos dos conciertos, el de Valencia el 14 de marzo de 1997 en la Sala Akuarela, y el del sábado 29 de marzo de 1997 en Carbonero el Mayor (Segovia, que sería el último, pues en abril es ingresado ya en el hospital.
Pero entre ambos conciertos hubo otro omitido en el libro, en la sala Moby Dick en Madrid, que fue su despedida de su querida ciudad, y no el concierto en Revolver en noviembre de 1996. Por tanto, Risi, a pesar de que se encontraba muy enfermo, tocó todo el mes de marzo. La sala Moby Dick, en la avenida de Brasil, por la zona de Cuatro Caminos, y abierta desde 1992, está situada en una zona “pija”, y el siempre chuleta Pepe nunca perdía su humor tuvo una de sus ocurrencias al saludar, que se convirtió en una frase mítica: -¡Nunca habíamos tocado tan al norte!.
Y es que Pepe Risi, de la estirpe de Keith Richards, nunca concebía un fin de semana sin subirse a tocar rock. Cuando dejó de hacerlo fue para ingresar directamente en el hospital en el que diría su último adiós. Dos días antes de morir Pepe llama desde el hospital a Loquillo al dúplex en que éste vivía con Oscar Aibar. Pero Loco no está, y es Aibar quien atiende la llamada, y así, por casualidad, el cineasta tuvo la oportunidad de escuchar la última etapa de esas conversaciones con Risi que registraría en tres horas de cinta… Y es que Risi quería que se escribiera la historia de la banda… Ricardo Moyano. Mayo de 2012.

Glosando Burning Veneno del rock. Gardoqui Bateria de Burning...

ARDOQUI, BATERIA DE BURNING.

 Jaime Gimenez Arbe, “El Solitario”, famoso atracador –o “expropiador”- de bancos, ha escrito en su libro de memorias sus correrías personales desde finales de los años 60. Describe como su mejor amigo a José Antonio Martín “Gardoqui”, que sufrió igualmente condenas por delitos contra la propiedad y tráfico de drogas. Para El Solitario, Gardoqui, preso en la cárcel de Picassent, tuvo la desgracia de caer en los años 80 en la lacra de la heroína. Lo que relaciona a Gardoqui e indirectamente al Solitario con Burning es que los dos delincuentes formaron un grupo de rock a comienzos de los 70, llegando a tocar –como los Burning- en la discoteca Argentina de San Blas, y que Gardoqui fue posteriormente batería durante algún tiempo de la banda de La Elipa. De hecho la similitud de su nombre con el del cantante Toño (José Antonio y Juan Antonio) dio lugar a confusiones cuando por ejemplo en 1982 se publicó la noticia de la detención del cantante, cuando quien había sido detenido era el baterista. Pero el episodio está lleno de dudas. ¿Cuándo fue realmente batería de Burning “Gardoqui” y por cuanto tiempo?. Hemos manejado como fecha posible el año 1976, cuando el primer batería Tito Estepa abandona la banda para irse con su novia, y antes de que entrara en la formación Ildefonso García ya en 1977. En ese tiempo convulso de milis y escasas actuaciones pasaron varios bateristas por el grupo de La Elipa, algunos también delincuentes como Sami, de San Blas, detenido al día siguiente de dejar la banda.

No obstante, el propio J.A. Gardoqui sitúa su presencia en Burning tras la grabación de “Atrapado en el amor”, o sea hacia 1982-1983. Añade que grabó varios temas, que quedaron en maqueta, y que estuvo en un par de giras del grupo. Es verdad que en ese tiempo Lito dejó un tiempo la banda, Daniel Assante tampoco estaba de forma fija en el grupo. Coincidiría entonces su unión a los Burning con esa noticia de la detención de un músico del grupo… Incluso habría que plantearse si no fue Gardoqui también el que grabó los temas en Bilbao junto a Toño y Manuel Fernández, y si estos son al menos algunos de esos temas maqueteros a que se refiere Gardoqui.

Pero todo esto parece falso: Manuel sólo recuerda como baterías de Burning de esa época a Lito y a Dani…Y en el libro de Alfred Crespo "Burning Madrid" (2012) la banda limita la presencia de Gardoqui a unos ensayos en el período de salida del primer batera Tito Estepa, es decir, como decimos, en 1976. Así pues, ni fue en 1982 ni por supuesto  Gardoqui estuvo dos años con los Burning, como el mismo sostiene. Las maquetas a las que alude serían los temas que se estaban gestando y que entrarían más tarde, mucho más tarde, en el LP "Madrid".

Lo que sí está claro es que en esos años duros de los finales de los sesenta y principios de los setenta, en esos barrios de extrarradio, San Blas, La Elipa, Carabanchel…, se desarrollaba una auténtica simbiosis entre el mundo de la delincuencia juvenil y el naciente rock urbano. En el libro de “El Solitario” queda claro como se agenciaban instrumentos musicales imposibles para sus recursos mediante un palo a la correspondiente tienda. Reproducimos unos fragmentos del texto relacionados con este episodio y con Gardoqui: “Aquel año (se refiere a 1970), a algunos jóvenes de la Conce se nos ocurrió formar un grupo musical. Yo tocaba el órgano electrónico y mi amigo José Antonio Martín Gardoqui se encargaba de hacer sonar la batería. Lo hacía muy bien y, con el tiempo, llegaría a integrar la mítica banda de rock Burning, la que cantaba aquello de «¿Qué hace una chica como tú en un sitio como este?». José Antonio tuvo una influencia determinante en mi gusto por el rock. Él disponía de una amplia colección de discos de vinilo en la que no podían faltar temas de los mejores grupos de rock. Gracias a él tuve acceso a algunas canciones prohibidas por la dictadura… Así se explica que tres menores de edad a bordo de un Seat 1.500 familiar llegásemos sobre las cinco de la madrugada a aquella tienda de la calle Jorge Juan sin el menor problema. Tatu se quedó en el coche, con el motor en marcha, preparado para la huida. Mientras, José Antonio y yo franqueamos la puerta utilizando la alta tecnología española: rompiendo el cristal con un adoquín que habíamos encontrado en una obra cercana. En pocos minutos nos hicimos con un equipo amplificador de voces, altavoces, micrófonos y cuatro guitarras eléctricas, que cargamos en el amplio Seat. No nos vio nadie o, al menos, como en la canción de Rubén Blades Pedro Navaja, no hubo curiosos, no hubo preguntas, nadie salió… Abandonamos el lugar de los hechos tranquilamente. Aparcamos el coche en un descampado del barrio y nos quedamos dormidos dentro, junto a los instrumentos incautados. Quedaba claro que como profesionales del robo éramos un de sastre, pero la expropiación había sido un rotundo éxito. A esas alturas, ya teníamos otro local de ensayo y habían cambiado también algunos componentes de la banda. A la guitarra estaba Pablo, al que apodábamos El marmolista porque en su casa, donde ensayábamos, su padre tenía un taller de lápidas para tumbas; José Antonio, más conocido por Pichita de oro por razones obvias, tocaba la batería; al bajo, Iñaki; y quien esto escribe tocaba el órgano electrónico. Guardamos los instrumentos que le habíamos birlado a Sabino el facha en un local anexo al taller del marmolista, que estaba muy cerca de la Plaza Bami, instalamos los que íbamos a usar y los probamos. Sonaban de maravilla.” Posteriormente, “El Solitario” vuelve a citar a Gardoqui: “Muchos años después, ya en la década de los ochenta, caería en las garras de la heroína, adicción que estuvo a punto de costarle la vida, y causante de que no prosperase como batería, que por entonces (se refiere a los principios de los setenta) tocaba muy bien…. En la actualidad, como una sombra de lo que fue, toca la batería en la banda de la prisión de Picassent”. (“Me llamaban el Solitario. Autobiografía de un expropiador de bancos. Jaime Gimenez Arbe”. Editorial Txalaparta, 2009). Muchos capítulos de este libro se pueden leer en la aplicación Google Books.